Obra de rehabilitación del colegio en Santa Cruz de Rurek presenta filtraciones, fugas de agua y ambientes inutilizables pese a estar recepcionada desde 2021.
La Municipalidad Distrital de La Merced, en la provincia de Aija, no ha adoptado acciones efectivas para exigir al contratista Consorcio Santa Cruz el saneamiento de los defectos o vicios ocultos identificados en la infraestructura de la institución educativa N.º 86147 del centro poblado Santa Cruz de Rurek, rehabilitada bajo el marco de la Ley de Reconstrucción con Cambios. La situación afecta gravemente el normal desarrollo de las clases y pone en riesgo la integridad física de estudiantes, docentes y personal escolar.
Según verificó la Contraloría General de la República, el 9 de abril de 2025 se evidenciaron filtraciones en los servicios higiénicos, humedad en pisos y paredes, y acumulación de agua en la sala SUM. Estas deficiencias, que persisten desde la ejecución de la obra, fueron informadas por la propia municipalidad en múltiples oficios, pero hasta la fecha no se ha logrado que el contratista actúe conforme a lo establecido por ley.
El contrato con el Consorcio Santa Cruz —integrado por las empresas VIMCE S.R.L., Construcciones e Inversiones FAMA E.I.R.L. e Inversiones Marvelz S.A.C.— fue suscrito en julio de 2020 por un monto de S/ 3 583 686,48. Aunque la obra fue recepcionada el 15 de abril de 2021, la normativa vigente indica que el contratista sigue siendo responsable por defectos ocultos hasta abril de 2028.
Pese a que la entidad emitió requerimientos formales —como la carta n.º 023-2025-MDM/GM de febrero de 2025—, no existe constancia de que el contratista haya reconocido las fallas ni que haya sido requerido en sede arbitral, condición indispensable para iniciar un procedimiento sancionador por incumplimiento, según el Reglamento de la Ley de Contrataciones del Estado.
Además, la municipalidad solo habría solicitado la reparación de los servicios higiénicos, omitiendo incluir los defectos detectados en la sala SUM, lo que evidencia una omisión en el cumplimiento de sus funciones como ente contratante.
Los padres de familia y docentes, mediante memorial fechado el 20 de marzo, alertaron que los ambientes afectados “ponen en riesgo la salud y seguridad de nuestros estudiantes”, sin obtener hasta ahora una respuesta concreta. La falta de intervención oportuna y contundente por parte de la gestión municipal no solo deja impune la deficiente ejecución del contratista, sino que agrava una problemática que compromete la educación de cientos de escolares en esta zona rural de Áncash.
