Aunque la gestión del alcalde Yoel Pepito Trujillo Cruz asegura trabajar con “transparencia y participación ciudadana”, la reciente I Audiencia Pública 2025 en el distrito de Masin-Huari ha dejado más dudas que certezas.
El evento, convocado para el 30 de mayo, se realizó sin transmisión en vivo por redes sociales ni cobertura de medios independientes, a diferencia de la primera audiencia de inicio de gestión, donde sí se permitió el acceso libre a la prensa y se transmitió en tiempo real. Desde entonces, solo se emiten notas de prensa sin mayor contenido informativo.
La publicación oficial sobre esta audiencia, compartida en el fanpage de la municipalidad y el portal de transparencia estándar, repite frases como “transparencia” y “rendición de cuentas”, pero omite datos cruciales: ¿cuánto se ejecutó del presupuesto? ¿Qué proyectos se realizaron? ¿Qué brechas sociales se han cerrado?
La población merece más que frases grandilocuentes y saludos protocolares. Necesita acceso real a cifras, informes detallados y explicaciones claras. La ausencia de transmisión en vivo y la falta de información sustancial evidencian un manejo comunicacional superficial que no satisface el derecho ciudadano a fiscalizar la gestión municipal.
Mientras no se abran los canales de información y se fortalezcan los espacios de rendición con datos verificables y accesibles, la palabra “transparencia” seguirá siendo solo eso: una palabra vacía.
